Lo dejo desangrándose y me hago un atún con pan
El crimen de Pioz, que no deja de ofrecernos detalles, pasará a la historia de los sucesos en España y será recordado como una de las matanzas más abominables perpetradas por una sola persona.
Ahora hemos conocido nuevos mensajes que el asesino confeso envió desde el chalé de Pioz aquella tarde-noche del pasado 17 de agosto a su amigo Marvin. Una conversación que se produce en tiempo real mientras mataba a sus tíos y a sus dos sobrinos.
Patrick Noguera llega a comentar: «No veo la hora de terminar con esta mierda, comer, dormir e ir para casa a dormir en mi camita».
En su relato, al que ha tenido acceso la revista Interviú, primero cuenta que asesinó a su tía Janaína, a la que decidió taparle los ojos porque «me agobiaba mirarle a la cara de mierda», y añade que le colocó una bolsa en la cabeza.
Leyendo la conversación se aprecia cómo Patrick disfruta con la matanza, afirmando que «ha llegado el mejor momento: descuartizamiento».
Después, asegura, acabó con la vida de los dos niños y esperó a que llegara su tío diciéndole a su cómplice que «al menos mi tío es más ligero que su mujer».
El asesino confeso llegó a intercambiar más de 100 mensajes con su mejor amigo, mensajes desenfadados plagados de macabros detalles, que demuestran la frialdad de Patrick, como por ejemplo «lo dejo desangrándose y me hago un atún con pan».
Incluso el propio Patrick parece ser consciente de su falta de empatía y apego, afirmando que «pensaba que iba a vomitar, pero he empezado riéndome, sin sentir nada».
Patrick junto a su amigo Marvin en una de las muchas fotos que compartían juntos en las redes sociales.
Además de estos mensajes, el presunto asesino envió a su amigo brasileño una veintena de fotos posando con los cadáveres y los charcos de sangre.
El caso continúa su curso. Este martes Patrick ha vuelto a los Juzgados de Guadalajara para someterse a nuevas pruebas forenses que determinen su estado mental. Mientras tanto en Brasil, Marvin, el presunto cómplice, continúa en prisión preventiva a la espera de conocer si será juzgado por encubrir, instigar y aconsejar a su amigo a través del WhatsApp en la ejecución de los asesinatos.
