El presidente de Gobierno, además, ha anunciado la compra de 344.000 pastillas contra la COVID-19 fabricadas por Pfizer
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que el Ejecutivo va a regular el precio de los test de antígenos y ha anunciado la compra, este mes de enero, de 344.000 pastillas contra la COVID-19 fabricadas por Pfizer para hacer frente a esta sexta ola de la pandemia.
«El debate que teníamos antes o durante estas Navidades ha sido, sobre todo, sobre la oferta de estos test; hubo un aumento exponencial de demanda pero no de oferta. Este tema ya está resuelto; ahora nos meteremos con el control del precio del test de antígenos», dijo ayer en la Cadena SER.
El presidente del Gobierno no ha desvelado ni cómo ni cuándo se va hacer, a pesar de que la sexta ola avanza con los precios disparados en algunas farmacias, mientras administraciones como la Comunidad de Madrid siguen entregando test gratis a sus ciudadanos.
También ayuntamiento como el de Torrejón de Ardoz han tomado la iniciativa de repartir test gratis de cara las fiestas navideñas, ante la escasez de este producto en el mercado y el alto precio que supone para algunas familias.
Sánchez, además, ha anunciado que el Gobierno va a comprar este mes 344.000 antivirales orales de covid fabricados por Pfizer que «reducen en un 88 por ciento la posibilidad de hospitalización de los enfermos más vulnerables», señaló.
También informó de que convocará una nueva Conferencia de Presidentes autonómicos online en enero para tratar las medidas puestas en marcha en cada territorio y confía en celebrar posteriormente una reunión presencial en febrero en la isla de La Palma.
«Hay que tener confianza en una vacunación ampliamente respaldada por los niños», manifestó el jefe del Ejecutivo, que recordó que el objetivo es que el 7 de febrero el 70% de los niños tengan la primera dosis y en la semana del 18 de abril el 70% cuenten con la pauta completa.
Sánchez aseguró que este mes habrá un pico de contagios por la variante ómicron y después empezará a bajar la curva. Además, se mostró contrario a abrir en España el debate sobre obligar a vacunarse a las personas que no lo han hecho porque aquí el 90 % de la población tiene la pauta completa.
