El camionero, que se dirigía a Loeches, transportaba un ácido peligroso y corrosivo
La Guardia Civil de Tráfico de Guadalajara dio el alto el pasado 17 de julio al conductor de un camión que transportaba mil kilos de ácido fosfórico en solución, una mercancía peligrosa y corrosiva, desde Reino Unido.
El conductor fue interceptado en un control rutinario al pasar por el kilómetro 83 de la A-2, en sentido Madrid, en el término municipal de Muduex (Guadalajara) cuando se dirigía a descargar al municipio de Loeches (Madrid), según ha informado este martes la Delegación del Gobierno en Guadalajara.
Los agentes querían comprobar su correcta circulación en materia del Acuerdo Europeo sobre el Transporte Internacional de Cargas Peligrosas por vía terrestre.
Al ver que el camionero tenía síntomas de hallarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas, la Guardia Civil le sometió a las pruebas del alcoholemia, que dieron como resultado 0,46 y 0,41 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, el triple del límite permitido (0,15 miligramos) para los conductores de este tipo de vehículos.
El conductor, de 60 años y nacionalidad polaca, se llevó tres denuncias. Una por triplicar la tasa de alcohol permitida, otra por no presentar la carta de porte (documento acreditativo y descriptivo de la mercancía transportada) y una tercera por minorar el descanso diario en más de una hora.
El vehículo, que transportaba 1.000 kilos (en bidones) de ácido fosfórico en solución desde el Reino Unido hasta Loeches, una mercancía peligrosa y corrosiva, quedó inmovilizado desde las 12 hasta las 20.45 horas, y cuando al camionero se le pasaron los efectos del alcohol, pudo continuar el viaje.