Escucharon gritos de auxilio de varias personas que estaban cenando en un restaurante porque una bebé se estaba asfixiando
Tres agentes de la Policía Nacional salvaron la vida de una bebé de 18 meses de edad, el pasado 10 de enero, en la T4 del aeropuerto de Barajas. Escucharon gritos de auxilio de varias personas que estaban cenando en un restaurante porque una bebé se estaba asfixiando.
Inmediatamente acudieron los policías y al verla inmóvil, con la cara morada y sin respiración, comenzaron las maniobras de Heimlich reaccionando la menor instantes después, recuperando el sentido.
Los policías se percataron de que la temperatura corporal del bebé era elevada por lo que le retiraron algunas prendas de ropa para conseguir así disminuirla.
Rápidamente trasladaron a la niña arropada con el abrigo de uno de los agentes hasta el centro de salud aeroportuario en compañía de su madre en un vehículo policial.
Una vez allí, el personal médico asistió a la menor y confirmó que se encontraba estable y fuera de peligro.
La madre de la pequeña mostró su agradecimiento hacia la labor realizada por los agentes por haberle salvado la vida.