El grupo municipal quiere que la calle Brigadas Internacionales pase a llamarse calle de la Reconciliación Nacional
El grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares presentará en el próximo Pleno del 19 de noviembre una propuesta para «la supresión o eliminación de la placa de la calle denominada Brigadas Internacionales y su sustitución, en el mismo lugar, por otra con la referencia calle de la Reconciliación Nacional», en virtud a una resolución del Parlamento Europeo.
En la moción, que debe ser aprobada por mayoría, explican que el nombre de esa calle del barrio de Ciudad 10 es un símbolo «que evoca el régimen comunista surgido de la extinta Unión Soviética».
El grupo municipal argumenta que «las Brigadas Internacionales fueron unidades militares organizadas y promovidas inicialmente por el Partido Comunista francés compuestas por voluntarios extranjeros de ideología comunista de 54 países que participaron activamente en la Guerra Civil española junto al ejército de la II República».

Imágenes: Google Maps.
Por ello, no consideran «procedente o adecuado el mantenimiento de una placa conmemorativa a dicha organización en Alcalá de Henares en conformidad con lo dispuesto por el Parlamento Europeo, siendo competencia de los ayuntamientos velar por el cumplimiento de la normativa y recomendaciones procedentes de la Unión Europea, en el ámbito de sus competencias, como son las denominaciones del nombre de sus calles».
En este sentido, la formación arremete contra la Ley de Memoria Histórica, al considerar que ha provocado «una interpretación totalitaria, sesgada, única y partidista de la historia y división entre los españoles, restaurando, innecesariamente, heridas del pasado que el espíritu de la Transición había cerrado», y cita la resolución aprobada en el Parlamento Europeo el pasado 18 de septiembre, bajo la denominación Importancia de la memoria histórica europea para el futuro de Europa, con ocasión del 80 aniversario del estallido de la Segunda Guerra Mundial.
En dicha resolución, indican, «el Parlamento Europeo condena de manera contundente tanto al comunismo como al nazismo, y se recomienda a los países miembros de la Unión Europea que adopten medidas para evitar, impedir o eliminar los símbolos de todo tipo que rememoren o legitimen esas dos ideologías criminales, suprimiendo las referencias a las mismas, y advierte de que en algunos Estados miembros siguen existiendo en espacios públicos símbolos que ensalzan o recuerdan dichos regímenes». «A mayor abundamiento», añaden, «el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha declarado que los tribunales de cada país miembro de la Unión deben valorar y tener en cuenta las resoluciones y recomendaciones del Parlamento Europeo para interpretar las legislaciones nacionales y asegurar su cumplimiento».