La autopsia deberá determinar ahora las causas de la muerte
El sargento de la Guardia Civil Francisco Borreguero paseaba, fuera de servicio, por el Pico de la Peñota cuando su perra Xena encontró este miércoles el cuerpo sin vida de la medallista olímpica Blanca Fernández Ochoa.
El sargento, que forma parte junto con la pastora alemana del Servicio Cinológico del instituto armado, con base en El Pardo, había comenzado la ruta desde Los Molinos, acompañado por un amigo.
El cadáver estaba en el Pico La Peñota, que tiene una altitud de 1.945 metros y se alza en el límite provincial de Madrid y Segovia, en una zona que corresponde a Collaillo del Rey.
En la vertiente madrileña, la montaña está dentro del término municipal de Los Molinos, donde reside el sargento de la Guardia Civil, informa Efe.
Los análisis forenses deberán determinar ahora las causas de la muerte. Los primeros indicios apuntan a que podría llevar muerta desde su desaparición.
La búsqueda incesante concluía así dejando a una familia destrozada y llena de dudas que deberá despejar la investigación.