La Policía Local denuncia dos vertidos ilegales y mantiene abiertas otras dos investigaciones por comportamientos incívicos
El Ayuntamiento de Azuqueca de Henares, a través de la Policía Local, está llevando a cabo una campaña especial de control del abandono de escombros en la vía pública. «Hemos detectado un aumento en este tipo de comportamientos incívicos que no solo suponen un problema de suciedad, sino también un riesgo para la seguridad y el medio ambiente por la mala gestión del reciclaje de estos residuos», afirma el concejal de Limpieza Viaria, Antonio Expósito, quien solicita la colaboración de la ciudadanía. «Para tener una ciudad limpia, todas las partes deben colaborar y sumar esfuerzos, tanto el Ayuntamiento con las brigadas de limpieza y mantenimiento, como los vecinos y vecinas», añade.
En los últimos días, la Policía Local ha denunciado dos vertidos ilegales —uno en un contenedor de envases y otro junto a una parada de contenedores— y, además, investiga otros dos casos de abandono de escombros en lugares inadecuados.
Según el punto 2 del artículo 20 de la ordenanza municipal de Seguridad y Convivencia Ciudadana, «se prohíbe arrojar o depositar residuos, desperdicios y cualquier tipo de basuras y escombros en las vías públicas y espacios de uso público, en la red de alcantarillado y en los solares y fincas sin vallar». Tampoco se pueden «depositar en los contenedores de la vía pública», puesto que los escombros, como residuo urbano especial, deben llevarse al Punto Limpio, situado en el kilómetro 2 de la carretera Azuqueca–Villanueva de la Torre. En este sentido, son los vecinos quienes deben transportarlos por sus propios medios.
El incumplimiento de esta ordenanza contempla sanciones. «Depositar en las vías o lugares públicos contenedores para escombros o material de construcción, sin la preceptiva autorización municipal» se considera infracción muy grave, con multas de 1.500,01 a 3.000 euros. Por su parte, «depositar en los contenedores de la vía pública residuos líquidos, escombros, enseres y aquellos que por sus características, peligrosidad o toxicidad deban ser entregados en el Punto Limpio» es una infracción grave, sancionada con entre 750,01 y 1.500 euros.