Tras subsanar los problemas de seguridad
La piscina del área recreativa de Riosequillo, situada en la margen derecha del embalse del mismo nombre, en el término municipal de Buitrago de Lozoya, y considerada una de las más grandes de la Comunidad de Madrid, finalmente ha abierto al público el pasado 31 de julio después de que el Canal de Isabel II decidiera cerrarla durante todo el verano tras detectar una serie de deficiencias estructurales que impedían su puesta en marcha.
Tras subsanar los problemas de seguridad, se ha abierto al baño una de las piscinas naturales favoritas de los madrileños, aunque todavía se tendrán que acometer obras, pero será después del verano.
Así, el Ayuntamiento informa que desde el pasado 31 de julio y hasta el 3 de septiembre, aunque la fecha de cierre podría ser prorrogable hasta el día 15 del mismo mes si el tiempo lo permite, el área recreativa queda abierta en horario de 11 de la mañana a 8 de la tarde. Los lunes permanecerá cerrada.
Los precios de las entradas individuales de martes a viernes son 4 euros (entrada general); 3 euros (menores de entre 3 y 12 años, jubilados, discapacitados, parados y familias numerosas); 2 euros (empadronados); y 2.50 (grupos de 25 personas como mínimo).
Los fines de semana, 5 euros (entrada general); 3.50 euros (menores de entre 3 y 12 años, jubilados, discapacitados, parados y familias numerosas); y 2.50 euros (empadronados).
El Consistorio recomienda para llegar en coche coger la salida por la A-1, salida 74 a Buitrago de Lozoya; en la rotonda desvío a la izquierda hacia el área recreativa de Riosequillo (está bien indicado) y la carretera lleva directamente a la entrada.
En transporte público hay que coger el autobús 191 con salida en Plaza de Castilla. Una vez en Buitrago de Lozoya se debe andar un poco hasta el área recreativa.
La piscina de Riosequillo, con una superficie de 4.500 metros cuadrados y un aforo para 2.000 personas, está completamente integrada en el entorno natural.
Miles de madrileños disfrutaron el año pasado de estas instalaciones, que disponen de zonas verdes y deportivas, así como de un área de juegos para niños.
Además en el verano de 2016 se incorporó una zona para que los visitantes que lo deseen practiquen fútbol-sala y baloncesto, un circuito con diez aparatos biosaludables y más zonas de descanso o lectura.
La piscina está adaptada para garantizar la accesibilidad de las personas con discapacidad, al igual que los vestuarios.