Fueron detenidas seis personas
Un coche camuflado de la Guardia Civil vigila una nave de una zona industrial muy frecuentada por los jóvenes del municipio como zona de ocio.
Ven entrar y salir gente constantemente. Permanecen poco tiempo en el interior de la nave, parece que entran consiguen lo que quieran y abandonan el lugar. Los investigadores contaban ya con una primera sospecha.
En un momento determinado deciden entrar para inspeccionar la nave, ver qué se cuece dentro después del trasiego de personas que no paran de llegar y se marchan al poco rato.
Dentro, encuentran a un grupo de gente y al responsable de la nave. No tienen que rebuscar demasiado para ver la prueba del delito: 2.093 gramos de marihuana, 62 gramos de cocaína, 23 gramos de metanfetamina, 63 pastillas de éxtasis y 1.430 gramos de hachís.
También encuentran 2 básculas de precisión, un machete y numerosos efectos destinados a la distribución y venta de drogas, como libretas de transacciones y bolsas de embalaje de dosis de diferentes tamaños.
Ya les habían cazado, se trata de seis jóvenes, de entre 23 y 31 años, de origen español, colombiano y ecuatoriano, vecinos de Mejorada del Campo, Velilla de San Antonio y Madrid.
Eran los que estaban suministrando droga a jóvenes del municipio al menos desde febrero, cuando los agentes constataron un aumento del consumo de sustancias estupefacientes en las calles de Mejorada del Campo.
Al comprobar sus antecedentes, supieron que contaban con varios delitos relacionados con el tráfico de drogas, además en su historial delictivo figuraban hechos relacionados con la tenencia ilícita de armas, malos tratos en el ámbito familiar, quebrantamiento de condena, delitos de receptación, atentado a agente de la autoridad, resistencia y desobediencia y contra la seguridad del trafico.
Un amplio historial que completa esta última detención por un delito contra la salud pública y, además, se les imputa pertenecer a una organización criminal, ya que estaba perfectamente organizados y estructurados para llevar a cabo en conjunto la venta de estas sustancias por todo el municipio.
La Guardia Civil calcula que el precio en el mercado del material incautado podría rondar los 25.000 euros.
Se había completado así uno de los mayores golpes al tráfico de drogas en la localidad.