El sindicato Comisiones Obreras denuncia que las obras afectarán a 15.000 alumnos de la Comunidad de Madrid
El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) ha elaborado un informe que concluye que al menos 65 centros escolares de la región padecen algún tipo de deficiencia de cara al próximo curso, que afectarán a 15.000 alumnos. De ellos, siete están sin construir, por lo que no funcionarán el curso que comenzará en septiembre, y más de treinta se encuentran en obras.
Además, el sindicato, considera «inciertas» las declaraciones del presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, quien manifestó que se van a abrir 30 centros. Por tanto, según CCOO, «el Gobierno de la Comunidad de Madrid incumple el Real Decreto 132/2010 sobre requisitos mínimos, que regula lo que cada alumno y alumna de España tiene que encontrarse en los centros escolares».
Para Isabel Galvín, secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid, «el presidente de la de región y su consejero de Educación asumen y promueven el incumplimiento de forma sistemática y generalizada de la normativa vigente».
Aquí en el Corredor del Henares, Comisiones cita algunos ejemplos como retrasos en la construcción del IES La Garena, en Alcalá de Henares, el William Shakespeare de Coslada; el Luis de Gongora, de Loeches, o la cuarta fase del CEIP Navas de Tolosa de Paracuellos de Jarama.
Asimismo, denuncia que el profesorado «no tiene los medios suficientes para poder desarrollar los trabajos y funciones docentes» como salas de profesores, aulas de apoyo y refuerzo, lugares específicos para atención a la diversidad, salas suficientes para desdobles y espacios para tareas administrativas o para atención a las familias.
En esta línea, según CCOO, también se incumple la normativa en lo relativo a asociaciones de padres y madres, «ya que muchos centros no disponen de espacios para llevar a cabo reuniones y las labores de padres y madres organizados».
Además, asegura que se incumple la legislación de prevención y riesgos de seguridad, por lo que «el sindicato seguirá denunciando centro a centro, ante los tribunales, por vía contencioso administrativa», explica Isabel Galvín, quien también afirma que «pondremos en conocimiento de la Inspección de Trabajo los incumplimientos en materia de seguridad, tal como comenzamos a hacer en junio con la denuncia del Colegio Público Cervantes de Getafe».
Ante esta situación, desde CCOO van a exigir al Gobierno regional un informe pormenorizado sobre la situación de los centros con un plan de inversiones que «normalice la situación de la enseñanza pública y dignifique la educación». «No podemos continuar en una situación en la que el consejero trivializa unas circunstancias dramáticas, con declaraciones en las que pretende normalizar que las clases se impartan en los comedores o los pasillo», señala Galvín.
Para el sindicato, «no se puede trivializar con que las plazas que se están creando fomentan un modelo de escolarización de niños y niñas sin techo porque no tienen aulas propias y carecen de un lugar estable donde desarrollar sus actividades y trabajos en un momento fundamental del desarrollo personal. Se trata de niños y niñas que carecen de una biblioteca, un terrario o un espacio concreto para sus pertenencias personales».
«Tampoco se puede trivializar cuando se están impartiendo clases en los pasillos o, como ocurre en el Colegio Cervantes de Getafe, en salidas de emergencia aunando asignaturas como Música y Religión, vulnerando además el derecho a no recibir clase de Religión», indica Comisiones.
Con todo, para el sindicato, esta situación implica «infinidad de aspectos que vulneran la Constitución y es un maltrato a la educación pública con el objetivo de desviar al alumnado a la escuela concertada y fondos a manos privadas». En opinión de Isabel Galvín, «esta política supone claramente deteriorar, hacer más pequeña y menos atractiva la educación pública en Madrid».