Contactaba con ellos a través de Internet haciéndose pasar por una atractiva mujer
La Guardia Civil ha detenido en Madrid a un abogado de 27 años como supuesto autor de hasta 40 delitos sexuales contra al menos 30 menores de 16 años, con los que contactaba a través de Internet y a los que instaba a practicar sexo con él como paso previo a mantener relaciones con una atractiva mujer.
Al menos en cuatro ocasiones consiguió su objetivo y grabó sus encuentros con cuatro víctimas, que accedieron «bajo engaño y encontrándose en una situación de inferioridad a practicar relaciones sexuales completas».
Los hechos constituyen un delito de abuso sexual agravado, castigado con penas que van de los 4 a los 10 años por cada delito.
El el hombre se encuentra en prisión investigado también por corrupción de menores y tenencia, producción y distribución de pornografía infantil.
En el registro de su domicilio y del despacho de abogados en el que trabajaba se intervino material informático con multitud de conversaciones con menores en redes sociales en las cuales intercambiaba archivos de contenido pornográfico, así como 83.500 fotografías y 1.345 vídeos de carácter sexual en las que aparecen menores.
Los agentes detuvieron al presunto agresor por primera vez en marzo, tras la denuncia presentada a mediados de octubre de 2017 por los padres de un menor de edad que mantenía conversaciones de contenido sexual a través de una red social con una supuesta mujer con la que intercambiaba archivos pornográficos.
Se le imputaron entonces los delitos de abuso sexual y corrupción de menores sobre cuatro víctimas y fue puesto en libertad con cargos.
No obstante, esta primera investigación llevó a los agentes a poder obtener más información sobre el hombre y descubrieron que usaba un modo de actuar muy poco común.
Además de emplear como forma de engaño a los menores la imagen de una atractiva mujer, imponía a sus víctimas como paso previo a tener relaciones con ella el que las mantuvieran con un amigo suyo, que en realidad era él mismo, y que se grabara en vídeo.
Lo logró con al menos cuatro menores y compartió a través de las redes sociales algunos de los vídeos grabados, motivo por el que fue de nuevo detenido a principios de este mes, cuando se registró su casa y su lugar de trabajo.
El acusado podría haberse valido de actividades que realizaba en su vida extraprofesional, donde ha mantenido contacto habitual con menores desde el año 2012 hasta su actualidad, para acometer su propósito criminal.
La operación sigue abierta con el objetivo de identificar a nuevas víctimas.