El padre de la novia espera que los hijos del autor del atropello intencionado, que acabó con la vida de cuatro personas y dejó varios heridos, también sean detenidos
Ramón Silva, padre de la novia de la boda gitana que terminó en tragedia a principios de noviembre en Torrejón de Ardoz, tras el atropello mortal de cuatro personas, habla con el diario ABC donde aclara el origen de la trifulca que desencadenó el fatal desenlace.
Por estos hechos hay una persona detenida, el portugués Micael Da Silva Montoya, conocido como «El Gallego», que aquel día atropelló de forma intencionada a varios de los invitados al enlace, que se estaba celebrando, con unas 500 personas, en el restaurante El Rancho de la Avenida de la Constitución.
Allí se presentó «El Gallego» con sus hijos y un sobrino poco después de la medianoche tras ver vídeos en directo a través de TikTok, según el padre de la novia. «Eso es costumbre entre nosotros. Si alguien viene después del banquete, lo acogemos y le servimos una copa», explica el progenitor.
«Nos da igual que sea de los nuestros o no», añade. «Es el marido de una prima de un primo de mi consuegro». «Yo no lo conocía, pero sí que alguno de mi familia política sabía que era conflictivo», apunta Ramón Silva durante la entrevista concedida al citado diario.
Una vez dentro, «el detenido y los hijos empiezan a meter la pata». «Vi que tenía una botella de whisky y le dije que la dejara porque esa botella era más cara y la teníamos reservada para otras personas», asegura el padre de la novia.
Según detalla, Micael y sus hijos empezaron a sacar el móvil y comenzaron a grabar «los culos de las mujeres», acompañando esa acción con comentarios machistas. Es entonces cuando el padre del novio y varios de sus allegados les invitan a marcharse.
El portugués discute con alguien por un «vaso de whisky» y uno de los jóvenes propina un puñetazo al consuegro de Ramón. Por si fuera poco, otro de los expulsados saca una navaja. «Se lo recriminan y le consiguen apartar», logrando que se vayan.
Al terminar la trifulca, se marchó al coche y se acercó despacio y con las luces apagadas hasta el corrillo formado en la calle. «La gente se confió y aprovechó para acelerar», asegura Ramón, que niega que el detenido y sus hijos se esperasen un rato para perpetrar el salvaje ataque.
También desmiente que el detenido o alguno de sus hijos quisieran cortejar a la novia, como se había dicho, pero espera que los hijos de Micael también sean arrestados: «Él no es el único culpable, esperamos que sean detenidos y los hijos vayan a un centro de menores».
Otra de las incógnitas del suceso es la desaparición del dinero regalado a los novios, conocido como la manzana, «unos 13.000 euros» que los llevaba la abuela del novio, que fue atropellada. «No sabemos si alguien aprovechó para cogerlo», relata, aunque no cree que fuera sustraído por los Da Silva.
Lo cierto es que en el vehículo Toyota Corolla con el que se perpetró el atropello se encontraron 3.000 euros, aunque la investigación apunta que, en su fuga, pasó por Vicálvaro para dejar a un pariente, donde le entregaron esa cantidad para huir a Portugal.
Ramón, más allá del destierro inevitable de los Da Silva, no quiere represalias. «No se puede pensar que por ser gitanos tiene que haber represalias», y se lamenta por el matrimonio, que hoy tendría que estar en su viaje de novios, «pero que está de hospital en hospital ayudando en todo lo que pueden».
Habla el padre de la novia de la boda de Torrejón: «Micael no es el único culpable, esperamos que los hijos sean detenidos» https://t.co/ceopawfMi2
📝Carlota Barcala y Aitor Santos
— abc_madrid (@abc_madrid) November 21, 2022