El objetivo es reducir el tráfico de vehículos privados en la capital
La Comunidad de Madrid va a poner en marcha un ambicioso Plan que permitirá integrar todos los aparcamientos disuasorios que existen en la actualidad en una red que gestionará el Consorcio Regional de Transportes y que permitirá incrementar su conocimiento y su uso por parte de los usuarios del transporte público.
El anuncio de este Plan lo ha realizado en la Asamblea de Madrid el presidente de la Comunidad, Ángel Garrido, durante su discurso en la apertura del Debate del Estado de la Región.
Se trata del Plan APARCA+T (APARCATE) que prioriza el uso de estos aparcamientos para las personas que vayan a utilizar el transporte público (con Abono Transporte) y para ello se instalarán sistemas de control de acceso y un sistema de tarifas ligado a ese uso que asegurará su gratuidad a los usuarios del transporte público.
En la actualidad la Comunidad de Madrid cuenta con 75 aparcamientos disuasorios repartidos por una treintena de municipios de la región, lo que supone una oferta de cerca de 30.000 plazas. Se trata de aparcamientos de distinta titularidad y modalidad de tarifas que ahora con este plan el Consorcio Regional de Transportes pretende unificar y poner a disposición del usuario del transporte público.
Con estas plazas, las ampliaciones en estos mismos aparcamientos y la creación de otros nuevos el Plan APARCA+T alcanzaría un total de 91 aparcamientos con más de 46.000 plazas que permitirán reducir el tráfico de acceso a la capital durante la hora punta,
El Plan contará con una inversión de 200 millones de euros y comprende dos líneas de actuaciones: la primera de ellas, ampliar y adecuar los aparcamientos ya existentes (identificarlos con una nueva imagen, acondicionarlos, dotarlos de vigilancia, integrarlos en la plataforma de gestión, instalación de barreras, delimitación de plazas…). En segundo lugar el Plan recoge también la construcción de nuevos aparcamientos (un total de 16-) en puntos estratégicos de la región ligados a los corredores de entrada y salida en la capital, en ciudades como Alcalá de Henares, Torrejón de Ardoz, Arganda y Rivas, entre otras.
Los primeros resultados se visualizarán de forma inmediata porque antes de que finalice esta legislatura se integrarán los 5 primeros aparcamientos con la nueva marca. Se trata de los aparcamientos de La Poveda, Rivas Futura, Rivas Vaciamadrid en el Corredor de la A-3, Colmenar Viejo en el Corredor de la M-607 y Ciudad Universitaria, que suman casi 4.500 plazas de aparcamiento.
Es parte de las actuaciones de una primera fase (2018-2021) que afectará en total a 29 aparcamientos con un total de 16.780 plazas y que tendrá una inversión de más de 75 millones de euros. De estos aparcamientos 4 serían de nueva construcción y se localizarían en San Sebastián de los Reyes, Ciempozuelos, Alcalá de Henares, Collado Villalba aplicando modelos de participación público privada.
La segunda fase (2022-2025) comprende una inversión de unos 65 millones de euros en 30 aparcamientos con 15.020 plazas.
El Plan se completaría con una tercera fase (2026-2029) que afectaría a 32 aparcamientos, 14.360 plazas y una inversión estimada de 61 millones de euros.
Los aparcamientos del Plan APARCA+T dispondrán de servicios a disposición de los usuarios para facilitar y promover su uso, como información en tiempo real de la ocupación de cada uno de los parkings incluidos en la red. También otros servicios asociados como la instalación de puntos de recarga eléctrica, reserva de plazas para vehículos de carsharing, alquiler por horas, motorsharing, sistemas de préstamos de bicicletas, talleres, cajeros…etc.