Una joven denuncia que fue drogada y obligada a mantener relaciones sexuales con varios hombres
La Guardia Civil está investigando un posible abuso sexual múltiple a una joven durante una fiesta ilegal en una casa de Colmenarejo en la que habrían estado varios concursantes del programa La isla de las tentaciones, de Telecinco, aunque en principio no estarían entre los sospechosos, según ha adelantado El Mundo y confirman fuentes de la Guardia Civil.
La joven presentó una denuncia dos días después del presunto suceso. En ella sostiene que fue drogada y obligada a mantener relaciones sexuales con «cinco o seis» hombres. Además, los investigadores describen que los participantes en la fiesta ilegal eran «niños de bien de los que salen en La isla de las tentaciones, chicos y chicas guapas, influencers».
La vivienda, que es una villa y tiene siete camas y cuatro baños, se oferta en una plataforma de pisos turísticos por un precio de 848,30 dólares por noche, poco más de 700 euros. Ubicada en una urbanización privada, tiene 400 metros cuadrados y 2.500 metros cuadrados de jardín. También es alquilada para eventos y para la grabación de anuncios, películas y programas de televisión.
El dueño de la propiedad ha explicado a Efe que la villa fue alquilada los días 12 y 13 de febrero con la finalidad de realizar la venta de un coche de alta gama. Esta persona interceptó por las cámaras de seguridad que se estaba celebrando una fiesta ilegal en su casa y avisó a los vigilantes de la urbanización y a la Guardia Civil, cuyos agentes se personaron en la fiesta.
Fue sobre las 22 horas de ese sábado cuando fueron desalojados los asistentes, que estaban incumpliendo las normas sanitarias frente a la Covid-19. La mayoría no llevaban mascarillas ni respetaban las distancias de seguridad, además ninguno era conviviente.
En la denuncia, la joven relata que fue invitada a la fiesta por una chica que había contactado con ella por Instagram. Además, explica que horas antes de acudir al chalet, le presentaron a varios concursantes de La isla de las tentaciones en el reservado de un local.
Dice que se tomó una copa y fue perdiendo progresivamente la consciencia. En la declaración consta que lo último que recuerda es una propuesta para mantener relaciones sexuales, a lo que se negó y pese a ello la forzaron, según su testimonio.
Los agentes han tomado ya declaración a varios invitados a la fiesta y visionado las cámaras de seguridad en busca de pruebas, aunque de momento no se han producido detenciones. La investigación sigue abierta y las diligencias se han declarado secretas.