La Fiscalía solicita la absolución para el agente por actuar en legítima defensa. Para el ladrón reclama seis años y medio de prisión
La Fiscalía pide seis años y medio de prisión para un acusado de robar en un chalé de Alcalá de Henares e intentar entrar en otro donde residía un policía local de la localidad que le disparó con su pistola hiriéndole de gravedad, para el que solicita la absolución por actuar en legítima defensa.
La Audiencia de Madrid ha señalado para el lunes el juicio por esta causa en la que el primer acusado, Enrique David H.H., se enfrenta a dicha petición del fiscal como presunto autor dos delitos de robo en casa habitada, uno de ellos con fuerza y el segundo con intimidación por unos hechos ocurridos en agosto de 2014, según informan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid.
El policía, Fernando J.R., venía siendo acusado en este procedimiento de un delito de homicidio en grado de tentativa pero en sus conclusiones provisionales para el juicio el fiscal solicita su absolución al estimar que concurre aplicar la referida circunstancia eximente completa de responsabilidad criminal de legítima defensa prevista en el Código Penal.
Según el fiscal, sobre las doce menos cuarto de la noche del 23 de agosto de 2014 Enrique David, en situación irregular en España y con antecedentes computables a efectos de reincidencia, acudió en un vehículo a las inmediaciones de un chalé situado en Alcalá de Henares.
Aprovechando que la pareja propietaria del inmueble se encontraba de vacaciones se encaramó en la segunda planta, apalancó con unos destornilladores la ventana del cuarto de baño y accedió al mismo.
Enrique David se dirigió a la habitación principal y tras una búsqueda intensa se apoderó de varias joyas y otros objetos de valor material y personal, que metió en unos bolsillos de su pantalón, y seguidamente fue saltando por los tejados de las viviendas contiguas hasta que llegó al chalé en el que residía Fernando J.R..
Enrique David trepó hasta el tejadillo del segundo piso de esta vivienda, donde se encontraba la habitación de Fernando J.R., quien estaba en ese momento en la cama.
Este, sobresaltado al escuchar un ruido en la ventana, se levantó, la abrió, descubrió al asaltante agazapado en la cornisa y preso del pánico y con la intención de protegerse cogió la pistola y abordó al ladrón al grito de alto policía, relata el fiscal.
Al ver que a pesar de la advertencia Enrique David se dirigía firmemente hacia él esgrimiendo en la mano derecha un objeto punzante y brillante y temiendo por su vida hizo un disparo a una distancia no inferior a 1,35 centímetros que impactó en la zona del epigastrio de su cuerpo, saliendo la bala por la zona lumbar derecha, continúa el Ministerio Público.
Como consecuencia de la herida provocada por el proyectil el asaltante sufrió importantes lesiones internas que requirieron 89 días para su completa duración, 21 de ellos de hospitalización, y de no haber recibido tratamiento médico y quirúrgico habría muerto, según el fiscal.
Tras recibir el disparo Enrique David huyó saltando por los tejados y los muros de los inmuebles colindantes y al llegar a su casa, en Madrid, su pareja se percató de las graves lesiones que presentaba y llamó al 112.
Los efectivos de la dotación médica acudieron a la vivienda junto con varios guardias civiles, que se hicieron cargo de la investigación.
Las joyas y los efectos de valor robados fueron encontrados en el bolsillo izquierdo del pantalón y devueltos a sus propietarios.