Las primeras pesquisas apuntaban a que la víctima vivía en un piso que había sido okupado ilegalmente y habría discutido con la mafia que presuntamente controlaba a los residentes
La Audiencia Provincial de Madrid juzga a partir de mañana lunes a los dos acusados de matar a un joven en Anchuelo en febrero de 2020, cuando supuestamente vivía de okupa, aunque este extremo se dirimirá en la vista oral, y para los que la Fiscalía solicita 15 años de cárcel.
La Sección Segunda de la audiencia madrileña iniciará este lunes el juicio con jurado contra A.V.B. y L.M.M. por presuntamente matar a Iván T.S., de 29 años y que había llegado a Anchuelo pocos días antes desde un pueblo de Cáceres.
Fue el 16 de febrero de 2020 sobre las 6 de la tarde, cuando los dos acusados estaban en la casa de Iván junto a un tercer hombre no identificado y se inició una discusión en la que «con la intención de acabar con su vida, cogieron sendos machetes que se encontraban colgados en la pared»,según la Fiscalía.
Mientras L. M .M. amedrentaba a una tercera persona que allí se encontraba para evitar que auxiliara a Iván, el otro acusado le golpeó la cabeza con un machete recto de 45,6 centímetros de hoja y un lado serrado, ocasionándole una herida.
Tras ello, lo apuñaló en el tórax con un machete curvo de 44 centímetros de hoja y un lado serrado, perforándole el corazón. Luego, según el relato de la Fiscalía, los dos huyeron del lugar. Finalmente fueron arrestados un mes después, el 25 de marzo de 2020, e ingresaron en prisión.
La Fiscalía pide para ambos, por delito de homicidio, una pena de quince años de cárcel y que indemnicen a los padres del fallecido con 150.000 euros -a cada progenitor- y con 100.00 euros a cada uno de los hermanos.
Tras el suceso la Guardia Civil detuvo a los dos presuntos autores materiales, que se habían fugado a Azuqueca de Henares (Guadalajara) y a Blanes (Girona), así como a otras tres personas como encubridores.
Las primeras pesquisas apuntaban a que la víctima vivía en un piso que había sido okupado ilegalmente y habría discutido con la mafia que presuntamente controlaba a los residentes. Se trataba de un bloque okupado casi en su totalidad desde hacía tiempo, según informa Efe.