En total, en la vivienda había seis canes que no tenían microchip identificativo, ni seguro, ni permisos
Las muestras biológicas tomadas a los dos perros que supuestamente atacaron a mordiscos a sus dueñas han sido analizadas en los laboratorios criminalísticos de la Guardia Civil y han determinado que, al menos, uno de ellos es un cruce de dogo de Burdeos con american standford, raza considerada potencialmente peligrosa. En total, en la vivienda había seis canes que no tenían microchip identificativo, ni seguro, ni permisos, según informa La Razón.
Los dos perros se encuentran desde ayer en el Centro Integral de Acogida de Animales de la Comunidad de Madrid (CIAAM), situado en Colmenar Viejo, donde serán examinados con más detenimiento por los veterinarios.
Dos de los seis perros de la familia, de la raza american stafford, sí son considerados peligrosos pero los agentes no creen que participaran en el suceso. No obstante, también han sido enviados al centro regional y, como el resto, se encuentran en cuarentena. Ninguno había presentado hasta ahora comportamientos agresivos.
Mientras, los agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil de Pinto, encargados de la investigación, siguen recopilando indicios de lo sucedido en la vivienda unifamiliar del número 578 de la calle Ibor, en la urbanización Balcón del Tajo de Colmenar de Oreja donde los maridos de Luisa y Eva encontraron en el patio a las dos víctimas con diversas mordeduras de perro.
Las primeras pesquisas ya han concluido que los perros atacaron primero a la mujer de 57 años. Fue después, y tras repetidas llamadas a su madre que no recibieron respuesta, cuando la hija de 41 años acudió a la vivienda y fue atacada. Un mordisco en el cuello de uno de los perros fue mortal al afectar a la yugular, han indicado a Efe fuentes de la investigación. Ambas murieron desangradas.
Los maridos de las víctimas son hermanos y, según el citado diario, tienen antecedentes por riñas, lesiones y hurtos. Si los perros estaban sueltos y sin los papeles en regla, el dueño de la casa podría enfrentarse a un delito de homicidio imprudente.