El fiscal considera al acusado autor de tres delitos de homicidio, con atenuante de alteración psíquica, y un delito de quebrantamiento de condena
La Fiscalía ha pedido 36 años de cárcel y 8 años de libertad vigilada para el autor confeso del homicidio de los tres hermanos hallados sin vida en su casa de la localidad madrileña de Morata de Tajuña.
En su escrito de conclusiones provisionales, el fiscal recuerda que Dilawar Hussein F.C., de origen paquistaní, con nacionalidad española, acudió el 17 de diciembre de 2023 al domicilio en el que residían los hermanos y acabó con la vida de los tres golpeándolos con un palo de hierro o un objeto contuso.
Dos días después, el investigado accedió al interior del domicilio, donde se encontraban los cadáveres y les prendió fuego. El acusado fue detenido el 22 de enero de 2024, y el Juzgado de Instrucción número 5 de Arganda del Rey acordó prisión provisional comunicada y sin fianza para el acusado. Ya en prisión, mató a su compañero de celda en Estremera.
En su escrito, la Fiscalía considera que el acusado tenía disminuidas sus capacidades intelectivo-volitivas de forma leve en el momento de los hechos, habida cuenta de que presenta un trastorno de personalidad en el que predominan los rasgos paranoides, junto a una carga progresiva de frustración vivencial situacional.
El fiscal considera al acusado autor de tres delitos de homicidio, con atenuante de alteración psíquica, y un delito de quebrantamiento de condena. Por ello, impone al acusado la pena de 12 años de prisión por cada uno de los tres delitos de homicidio, 36 años en total, y 8 años de libertad vigilada, además de una pena accesoria de inhabilitación absoluta durante el tiempo de condena. Por el delito de quebrantamiento de la prohibición de aproximarse a una de las hermanas (Francisca A. G. A.), pide una pena de 18 meses de multa a razón de una cuota diaria de 15 euros.
La principal hipótesis que maneja la Guardia Civil es que el crimen estuvo motivado por un ajuste de cuentas por las deudas que habían contraído los hermanos con algunos conocidos. Las dos hermanas se habían arruinado tras ser víctimas de una estafa amorosa y pedían dinero a sus allegados y vecinos de forma recurrente. A principios de 2023 alquilaron una habitación al acusado, al que supuestamente acabaron debiendo unos 60.000 euros, informa Efe.
