La juez del caso rechaza el recurso de la familia de la joven contra la decisión de dejar en libertad al único detenido
Se cumple un año del asesinato de Miriam Vallejo, de 25 años, en un camino de la localidad madrileña de Meco, colindante con Villanueva de la Torre (Guadalajara), y el único sospechoso, Sergio S.M., de 29 años de edad, seguirá en libertad provisional, según se ha conocido en las últimas horas.
La titular del Juzgado de Instrucción Número 5 de Alcalá de Henares ha desestimado el recurso de reforma interpuesto por la familia de la joven contra la decisión de dejar en libertad, el pasado mes de diciembre, al único detenido, por falta de pruebas concluyentes contra él. No obstante, Sergio, novio de la mejor amiga de Miriam, Celia, y compañero de piso de ambas cuando ocurrieron los hechos, deberá comparecer semanalmente ante el juzgado.
Mientras tanto, la Guardia Civil continúa con la investigación de un caso con muchas incógnitas por resolver y que todavía se encuentra bajo secreto de sumario. Una de las claves podrían ser las pruebas de ADN cuyos resultados aún están pendientes, como contamos aquí en MiraCorredor.
Además, según publicó ABC, los investigadores estrían convencidos de que fue Sergio quien asestó múltiples puñaladas a la joven, aunque no descartarían que hubiera podido recibir ayuda de alguien durante el crimen o después, para encubrirle.
Desde que fuera detenido, el acusado ha mantenido su inocencia en todo momento, pero no se ha mostrado colaborador con los agentes, más bien se ha negado a declarar y se ha limitado a afirmar que es inocente, apuntaba el citado diario.
Pruebas pendientes
La Guardia Civil se encuentra a la espera de los resultados de varias pruebas que determinen si el sospechoso es o no culpable.
Por un lado, se tiene que analizar si hay ADN de Miriam en una chaqueta del sospechoso, donde un perro especializado marcó posibles restos dos meses después del arresto en el cuello, en una manga y en la partera delantera.
Tampoco se conocen los resultados del análisis del coche del acusado, que pudo utilizar para desplazarse al descampado donde Miriam paseaba a los perros cuando la asesinaron. En la parte delantera del interior del vehículo se marcaron vestigios sospechosos donde, por ejemplo, podría haber depositado un cuchillo.
Por último, falta por examinar en profundidad el disco duro de la Play Station 3 con la que, según dijo, estaba jugando en el momento del crimen. Para ello, se necesita un oficio de Sony España.
Las pruebas iniciales arrojaron que había ADN de Sergio en ropa de Miriam y viceversa, pero podría ser por transferencia, ya que ambos compartían vivienda y hacían la colada juntos. Fue una de las alegaciones de su defensa para que Sergio quedara en libertad.