Ha sido rescatada por la Guardia Civil en la isla de La Gomera tras pasar la noche agarrada a una rama junto a otra joven senderista
La Guardia Civil ha rescatado a una estudiante de Guadalajara de 23 años en Hermigua (La Gomera) donde se encontraba junto a otra estudiante de Almería practicando senderismo. La dos, que viven en Tenerife, pasaron la noche agarradas a la rama de un árbol y al borde de un precipicio.
La operación de rescate se inició durante la madrugada del martes cuando se desplegó un dispositivo de la Guardia Civil para rescatar a las dos senderistas que dieron aviso de su extravío al 112.
Ya en la madrugada, solas y expuestas al frío por el fuerte viento reinante y la humedad, avisaron que se encontraban en riesgo al haberse deslizado unos veinte metros una de ellas por una ladera muy inclinada, en la zona alta del camino de El Rejo en el paraje natural de El Cedro.
De hecho, quedó expuesta a una caída vertical peligrosa apenas agarrada a las ramas de un árbol, mientras que la otra joven había intentado ayudarla quedando inmovilizada en iguales condiciones, requiriendo el auxilio urgente para su rescate.
Sobre las 1.00 horas se activó a la tripulación del Helicóptero de la Zona de Canarias de la Guardia Civil, que trasladó en plena madrugada a tres profesionales del equipo de Rescate en Montaña del Cuerpo GREIM hasta la isla.
Sobre las 3.50 horas, los agentes empezaron a rastrear el monte en busca de las senderistas dotados de material para escalada, llegando hasta ellas alrededor de las 4.20 horas.
Las jóvenes se encontraban en una situación muy precaria agarradas para evitar su caída al desfiladero.
Los agentes, tras asegurarlas y evaluar su estado, procedieron a su rescate y descenso seguro por la pared vertical articulando un rápel en varios tramos de más de 150 metros con cuerdas, con las que llevaron a salvo a las extraviadas hasta la parte baja de la pared, y posteriormente hasta la curva del camino inferior, donde el resto del operativo de rescate con sus vehículos les esperaban para su traslado.
Al parecer las senderistas se extraviaron sobre las 17.00 horas del lunes y dieron aviso al 112 solicitando ayuda, indicando que estaban fuera del camino porque intentaban atajar antes de que se hiciera de noche.
Ya de madrugada, al intentar salir de la zona guiándose por el GPS del teléfono y creyendo que el acceso a la carretera era nivelado, cayeron en la trampa del descenso vertical, quedando a un paso de caer por el precipicio, algo que impidió inicialmente un árbol al que quedaron agarradas.