El Ayuntamiento reconoce que el mobiliario instalado no es el más adecuado
El Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha decidido retirar los enormes cubos que se habían instalado en la calle Libreros, tras las críticas de vecinos y oposición.
«A las 24 horas de colocar el nuevo mobiliario en Libreros el tripartito liderado por Javier Rodríguez Palacios ha anunciado la retirada de buena parte de estos elementos. Se han dado cuenta de que los cubos y las papeleras instaladas este miércoles estaban distribuidos para el tráfico rodado de vehículos cuando hace dos meses que el alcalde había anunciado la peatonalización total de esta vía», afirma el concejal del PP Marcelo Isoldi.
El Consistorio, por su parte, ha anunciado que se trataba de «una prueba». «Se dispuso de manera provisional, sin realizar ningún tipo de anclaje, el mobiliario urbano previsto para esta vía en el proyecto original de la obra, que contemplaba una semipeatonalización del entorno, con la circulación de vehículos en el centro de la calle y en consecuencia con elementos de mobiliario en forma de cubo que una vez anclados garantizarían la seguridad de los peatones ante el paso de vehículos», señala.
Asimismo, reconoce que «el resultado de esta distribución del mobiliario en el contexto de una calle que finalmente va a ser totalmente peatonal no parece el más adecuado, por lo que se van a retirar los elementos de seguridad en forma de cubo que estaban previstos en el proyecto original», a pesar de que uno de los concejales del equipo de Gobierno, Alberto Egido, mostraba con orgullo en Twitter el nuevo mobiliario.
Así está quedando la recién peatonalizada calle Libreros de #Alcalá con su mobiliario urbano.
El #PatrimonioDeLaHumanidad hecho patrimonio de las personas. pic.twitter.com/yKM9E7EaEJ— Alberto Egido (@EgidoViciana) 25 de abril de 2019
No obstante, «se mantendrán los bloques largos y las papeleras para comenzar a dar servicio a las personas que disfruten de la calle Libreros, para posteriormente añadir más mobiliario como jardineras y más bancos», sostiene el Ayuntamiento.
Según explica, «este mobiliario se ha adquirido no solo para la calle Libreros sino para el conjunto del casco histórico de la ciudad, por lo que será situado en otras ubicaciones, plazas y espacios públicos más adecuados».
Para los populares, sin embargo, se trata del «enésimo despropósito» de una obra que se iba a ejecutar en ocho meses y que va camino del año. «Las prisas para que la cabalgata de Reyes pasara por Libreros sin apenas tiempo para que el solado se secara, lo que provocó que a los días siguientes hubiera que sustituir los baldosines rotos o levantados, las diferentes modificaciones del proyecto, la decisión de convertir estas vías en peatonales con las obras bastante avanzadas sin consenso y sin hablar ni con vecinos ni comerciantes son sólo algunos de los episodios de la pésima gestión de esta obra», manifiesta el concejal Marcelo Isoldi.
El edil popular cree que es «inconcebible» que «en dos meses nadie del tripartito haya caído en la cuenta de que la distribución de los elementos tenía que haber sido distinta. Esta es la atención que prestan a la que iba a ser la gran obra de la legislatura».
Isoldi insiste en que el PP está a favor de la peatonalización. «Lo que criticamos es la improvisación, los cambios de rumbo una vez comenzadas las obras, el escaso rigor y control y la mala ejecución de este proyecto que tendría que haber sido un emblema y que se va a convertir en la obra faraónica más desastrosa de este equipo de Gobierno».
Por ello, desde el PP se preguntan «¿Cuánto va a ser el sobrecoste de tanto despropósito?, ¿cuánto van a suponer los nuevos elementos ornamentales que se van a instalar?, ¿se habrían empleado otros materiales si desde un primer momento se hubiera planteado que la calle Libreros y la Plaza de Cervantes fueran peatonales?, ¿se habrían utilizado otros adoquines donde en el proyecto original se dibujaban aceras o pasos de cebra?».