Es la última hipótesis de un caso que mantiene en vilo a los vecinos
El Confidencial ofrece nuevos detalles sobre la investigación del crimen de Miriam Vallejo, la joven española de 25 años cuyo cadáver fue hallado en un descampado de Meco el pasado 16 de enero.
Tras varios semanas de investigación, la Guardia Civil baraja la hipótesis de que el asesino o asesina confundiera a Miriam con otra persona, en concreto con su compañera de piso, que estaba trabajando en el momento en que ocurrieron los hechos, apunta el citado diario. El novio de esta chica además se encontraba jugando a la Play y ha sido descartado como sospechoso.
La falta de luz en la zona, la oscuridad de la noche, el gorro y la bufanda que le cubrían el rostro por el frío y los perros de su compañera de piso que paseaba la joven, pudieron confundir al autor del crimen. Tres de los cuatro perros que llevaba eran de su compañera, ambas de rasgos similares y misma complexión.
Todo ocurrió en apenas 10 minutos. Miriam salió de su casa, un chalé de Villanueva de la Torre (Guadalajara) pegado al campo a las 20.40 horas.
Tras reunirse con otros dueños de perros y charlar con ellos sobre el frío y sobre unos nuevos collares luminosos que le acababa de comprar a los canes, decidió separarse del grupo y adentrarse en la oscuridad para contemplar la iluminación de los collares.
Aproximadamente diez minutos después, a las 20.50, dos jóvenes la encontraron cosida a puñaladas (hasta 24 recibió), tirada en el suelo, en mitad de un camino de tierra, perteneciente a la vecina localidad de Meco (Madrid).
Las cuchilladas fueron asestadas con saña en espalda y cráneo. El nivel de violencia alcanzó tal grado que al llevar a cabo la última el asaltante partió la punta del machete y la dejó dentro de ella, publica El Confidencial. No le faltaba nada y tampoco había sido agredida sexualmente.
La incógnita es si hubo o no confusión, y si la hubo, cuáles eran las razones del asesino para acabar con la vida de la otra chica. No obstante, la Guardia Civil trabaja con varias hipótesis abiertas y no hay nada descartado.
Tampoco se descarta que pueda ser un crimen ocasional, es decir, que no la estuvieran acechando y, al mismo tiempo, se sigue indagando sobre los hombres con los que la joven contactó a través de aplicaciones de citas.
La joven compañera de piso ya expresó su malestar en las redes sociales donde dijo que se sentía acosada en el pueblo porque la estaban relacionando con el crimen, llegando a decir incluso que había sido detenida. «Estoy viviendo un infierno», afirmó Celia en un texto publicado en su Facebook, como adelantó MiraCorredor.