El centro desinfecta espacios para volver a la normalidad aunque con la previsión de un posible repunte
La presión asistencial desciende de forma gradual en los hospitales madrileños, en Urgencias, Hospitalización y Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), por lo que recuperan espacios que habían habilitado para pacientes con COVID-19.
En el Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, que llegó a albergar a casi 400 pacientes con COVID-19, siendo uno de los más afectados, continúa la desinfección de los espacios en los que de forma excepcional se ubicaron nuevas camas durante el pico de la pandemia, a medida que desciende el número de ingresados, 131 personas hasta ayer por la mañana, han señalado a Efe fuentes sindicales.
La biblioteca del centro, utilizada durante varias semanas para el cuidado paliativo de pacientes, ha sido el último espacio en liberarse, para proceder a su desinfección.
Aunque con la previsión de un posible nuevo repunte en el número de casos, a medida que se relajan las medidas de confinamiento, el centro ha comenzado de manera progresiva con la reapertura de algunas de las unidades de planta en las que permanecían ingresados los pacientes con COVID-19.