La Fiscalía solicita para el acusado 17 años de prisión
La Fiscalía de Madrid pide 17 años de prisión para el presunto autor de la muerte por estrangulamiento de una mujer de 42 años con quien concertó una cita sexual en una casa de Alcalá de Henares a través de WhatsApp.
Israel G.P. se sentará desde el próximo miércoles en el banquillo de la Audiencia Provincial de Madrid en un juicio con jurado popular.
El Ministerio Público le acusa de los delitos de homicidio y robo con violencia en casa habitada y, además de los 17 años de cárcel, reclama 350.000 euros de indemnización para los familiares de la víctima.
Los hechos se produjeron sobre las cuatro de la madrugada del 11 de marzo de 2018 en la casa de la mujer, un bajo situado en la calle Juan de Vergara de Alcalá de Henares, como contamos aquí en MiraCorredor.
Según el Ministerio Público, el acusado y la víctima habían acordado en una conversación de WhatsApp, de forma consentida y a cambio de dinero, una cita sexual.
En un momento determinado, el hombre agarró a la mujer del cuello con fuerza y la estranguló hasta la muerte antes de dejarla desnuda sobre la cama, dejar todo en orden y robarle el bolso, que arrojó en un contenedor, y dos teléfonos móviles.
Uno de esos teléfonos se lo regaló a un amigo y el otro lo vendió en una tienda de segunda mano de Alcalá, lo que permitió la posterior identificación y detención del presunto asesino.
La Policía encontró al día siguiente el cadáver de la mujer, divorciada y con dos hijos de 16 y 13 años, después de que la propietaria de la vivienda alertara al 091 de que no sabía nada de su inquilina, al no responder a las llamada telefónicas ni al timbre de la puerta.
El acusado, en prisión provisional desde el 26 de junio de 2018, está diagnosticado de inteligencia límite y trastorno adaptativo de ideología idiopática, con una discapacidad del 35 por ciento.
Sin embargo, según el escrito de la Fiscalía, «Israel G.P. sabe distinguir el bien del mal, lo justo de lo injusto, lo bueno de lo malo, no apreciándose que padezca dependencia a tóxicos, ni circunstancia alguna que pudiera afectar a sus capacidades mentales de conciencia, inteligencia y voluntad».