Son zonas donde el agua está controlada por las autoridades sanitarias
La Comunidad de Madrid dispone de 4 zonas naturales de baño censadas oficialmente, en las que se controla la calidad del agua periódicamente a lo largo de la temporada estival en los 5 puntos de muestreo establecidos.
Las zonas autorizadas para darse un chapuzón esta temporada, que comenzó el pasado 15 de mayo y se extiende hasta el 15 de septiembre, son Las Presillas (río Lozoya) en Rascafría; Los Villares (río Tajo) en Estremera; El Muro y Virgen de la Nueva (pantano de San Juan) en San Martín de Valdeiglesias; y Playa Alberche (río Alberche) en Aldea del Fresno.
En la temporada 2016 se prohibió el baño en la zona de Río Manzanares – La Charca Verde, como consecuencia de necesidades de protección ambiental. Asimismo, la Comunidad recuerda que tampoco está permitido el baño en el resto del curso del río Manzanares.
Durante toda la temporada de baño, los Servicios de Salud Pública de la Comunidad de Madrid realizan inspecciones y análisis del agua en estas zonas de baño para comprobar la calidad de las aguas, así como de las condiciones higiénico-sanitarias de las playas. En cada punto de muestreo se realizan, como mínimo, ocho tomas de muestra de agua por temporada.
El agua de las zonas de baño se valora en función de los resultados analíticos de cada toma de muestra y los resultados analíticos de las muestras recogidas en la primera quincena de junio, en los cinco puntos de muestreo, indican que las aguas de las zonas de baño de la Comunidad de Madrid son aptas para el baño.
Consejos para disfrutar del baño de forma segura
– No lanzarse al agua en zonas desconocidas, con poca profundidad o desde una altura elevada o donde pueda haber obstáculos como piedras, ramas o exceso de bañistas.
– Comprobar cuidadosamente la profundidad del agua antes de sumergirse y evitar bucear o saltar en aguas turbias donde pueden no ser visibles otros nadadores y objetos.
– Meterse en el agua lentamente o tirarse de pie varias veces antes de hacerlo de cabeza y, en ese caso, recordar que los brazos deben situarse en prolongación del cuerpo para proteger el cuello y la cabeza. Tirarse de cabeza desde una gran altura, en sitios de poca profundidad o sin conocer si existe algún obstáculo en el fondo, puede producir lesiones muy graves.
– Vigilar a los menores en todo momento cuando estén en el agua o jugando cerca de ella, incluso cuando la profundidad sea pequeña. No delegar esta responsabilidad en otro niño/a, incluso aunque sea mayor.
– Evitar el consumo de alcohol antes de cualquier actividad en el agua.
– Bañarse de noche es muy peligroso, si le ocurriera algo, nadie podría verle.
– Salir enseguida del agua si se encuentra cansado o siente frío.
– Si no sabe nadar o no sabe nadar bien, utilizar un chaleco salvavidas para bañarse o practicar un deporte acuático. Los flotadores hinchables no son recomendables.
Asimismo, las autoridades recuerdan que es peligroso acudir a zonas de baño no autorizadas.