La clínica Dr. Sanz Vázquez da 20 días a sus ancianos para que desalojen las plantas de geriatría tras residir varios años en ellas y estar al corriente de pago
«Pasmo y estupor». Así han definido lo que han sentido algunos de los familiares de la treintena de ancianos residentes en las tres plantas de geriatría de la popular clínica alcarreña Dr. Sanz Vázquez, situada en el Paseo Fernández Iparraguirre, ahora en manos del Grupo Hospitalario HLA, cuando les han comunicado por escrito que disponen de menos de un mes para dejar libres las habitaciones que han ocupado, en muchos casos, durante años, según publica El Heraldo del Henares.
Según estos familiares, el pasado lunes 28 de octubre recibieron en mano una carta firmada por el director del centro, Christophe Ramírez Parenteau, según la cual se les comunicaba «el cese de la actividad de la Clínica Dr. Sanz Vázquez en el área de residencia».
Por este motivo, se les informaba que el traslado de los residentes geriátricos debía estar concluido antes del viernes 22 de noviembre, es decir, en menos de un mes desde la comunicación, algo que estos familiares consideran materialmente inviable dado que, muchos de ellos, son completamente dependientes y no existen plazas adaptadas libres para ellos en la actualidad en otros centros.
De hecho, han denunciado que la propia clínica les ha facilitado ya nombres de otras residencias de Guadalajara, como Nuevo Horizonte, Siglo XXI o Casablanca, sin saber si en las mismas hay plazas y si los ancianos van a ser atendidos en las mismas condiciones que en Sanz Vázquez.
«¿Qué ocurrirá si no encontramos plaza antes del día 22 de noviembre, dejarán a nuestros familiares tumbados en una camilla y sin asistencia sociosanitaria, en la calle?», se han preguntado algunos de estos familiares.
Además, han denunciado que «esta premura se debe a que, según nos confirmaron en la propia clínica, no podían anunciar el cierre de las plantas de geriatría antes para evitar conflictos laborales, ya que entre 10 y 20 trabajadores podrían ser despedidos, y anunciarlo con más tiempo habría causado problemas laborales en el centro», señalan.
Estos familiares han manifestado que hace tres años se les comunicó que se iban a realizar obras de ampliación y reforma de las instalaciones y que, por este motivo, los ancianos, algunos con 8 y 10 años de antigüedad en el centro, iban a ser trasladados de habitación en función del desarrollo de las obras, «pero nunca se nos advirtió de que pudieran ser desahuciados del centro, a pesar de que estamos al corriente de pago (alrededor de 1.800 euros al mes)». «¿Acaso nuestros familiares son muebles que se pueden llevar de aquí para allá?», han añadido.
Fuentes del departamento de Administración de la clínica, encargado del proceso de desmantelamiento de las tres plantas de geriatría (sótano, primera y segunda), han confirmado la entrega de la carta de desalojo a los familiares, así como las negociaciones con los trabajadores, pero han rehusado hacer cualquier otro tipo de declaraciones.