Borrell advierte de un peligro nuclear real tras las amenazas de Putin
Este lunes ha concluido sin acuerdo la primera reunión entre representantes de los gobiernos de Rusia y Ucrania en Bielorrusia para tratar de frenar el conflicto y ambas partes se han emplazado a una segunda ronda de negociaciones. Ucrania ha exigido un alto el fuego y la retirada de las tropas rusas. Moscú asegura que tiene la intención de llegar a un acuerdo.
Una primera toma de contacto que ha estado marcada por la solicitud formal del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, para la adhesión del país a la Unión Europea, inicio de un proceso que Kiev ha pedido acelerar como respuesta a la invasión. Putin, por su parte, se ha comprometido ante el presidente francés, Emmanuel Macron, en una llamada a suspender los ataques contra la población.
Ucrania y Rusia se han visto este lunes las caras por primera vez desde la invasión en un encuentro que ha durado unas seis horas. En los próximos días las delegaciones de ambos países volverán a sentarse, pero será en la frontera entre Polonia y Bielorrusia. La parte ucraniana afirma que ambas partes han identificado «una serie de temas prioritarios sobre los que se han perfilado determinadas decisiones».
La reunión de hoy llegaba después de las declaraciones de Putin este domingo, en las que dijo que ordenaba poner las fuerzas de disuasión del Ejército ruso, encargadas del armamento nuclear, en régimen especial de servicio, una amenaza que para el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, supone un peligro real.
«Los más altos cargos de los principales países de la OTAN se permiten declaraciones agresivas en contra de nuestro país, por eso ordeno al ministro de Defensa y al jefe del Estado mayor poner las fuerzas de disuasión del Ejército ruso en régimen especial de servicio», fueron las palabras de Putin, que también criticó las «sanciones ilegítimas» impuestas a Rusia.
Preguntado por esta amenaza durante una entrevista en Onda Cero, Borrell ha advertido de que «la amenaza nuclear ahora está siendo más explícita». «Esto demuestra la clase de personaje con la que nos enfrentamos. Puede que sea una amenaza retórica pero es una gigantesca irresponsabilidad elevar el nivel del conflicto a esos términos», ha dicho.
«¡Alármense, alármense, alármense! Creo que es una irresponsabilidad absoluta en este momento apelar al arma nuclear», ha contestado al ser preguntado hasta qué punto tenemos que alarmarnos tras las palabras de Putin. Según Borrell «estamos haciendo algo que nunca habíamos hecho porque estamos enfrentándonos a algo que nunca había ocurrido».
«Nunca había ocurrido una invasión en el más puro sentido de la palabra militar por todos los medios de un país a otro. Es una guerra total de Rusia a Ucrania y no podemos quedarnos cruzados de brazos», ha defendido el jefe de la diplomacia europea. «Ya que no vamos a enviar tropas, enviemos por lo menos armas, démosles municiones que es la primera cosa que nos piden», ha añadido.
Borrell ha afirmado que «la Unión Europea no es una alianza militar, no estamos pensados para eso, no tenemos ni los medios ni las capacidades ni la voluntad, la UE es una fuerza de paz pero llegado un cierto momento hay que ayudar a aquellos que sufren una agresión tan violenta y tan injustificada como esta».
La OTAN también ha criticado la «peligrosa retórica» del presidente ruso. «Si combinas esta retórica con lo que los rusos están haciendo sobre el terreno en Ucrania, lanzando una guerra contra una nación soberana independiente, esto añade gravedad a la situación», ha dicho el secretario general de la organización, Jens Stoltenberg, en una entrevista en la CNN.