Los vecinos de Abánades no se pueden creer todavía que los ladrones pudieran desvalijar el pueblo sin que nadie se diera cuenta de nada. Hablamos con su alcalde que se muestra preocupado por la falta de vigilancia por parte de la Guardia Civil en pequeñas zonas rurales como ésta
Todo ocurrió la noche del pasado 17 de marzo, la semana anterior a la Semana Santa. Los apenas 30 vecinos que viven en Abánades se levantaron al día siguiente y comprobaron que un montón de casas del pueblo y naves estaban forzadas. Los ladrones entraron y se llevaron todo lo que quisieron: desde un todoterreno hasta motosierras, ordenadores, joyas, dinero… Los cacos desvalijaron las casas y las registraron sin ninguna prisa, tenían toda la noche por delante para cometer su fechoría, desde las 12 de la noche hasta las 4 o las 5 de la mañana.
En total entraron en 9 propiedades, entre casas y naves, pero el miedo cunde por todo el pueblo. Los vecinos no pueden dormir tranquilos después de lo sucedido.
En invierno, en Abánades viven unas 30 personas, la mayoría mayores, aunque en verano reciben visitas turísticas y la población crece hasta los 300 vecinos o más.
En el bar entraron y el dueño estaba durmiendo arriba y no se enteró, cuenta su alcalde, Luis Miguel Foguet a MiraCorredor.tv. «Si por la noche oyes ladrar a un perro o cualquier ruido, pues dices lo mismo es una zorra que viene a los cubos de la basura».
«Los ladrones cuando vieron el pueblo no necesitaban comprobar en qué casas vive gente, con el piloto de colores que ha puesto Unión Fenosa en los contadores por la noche canta y se ve a diez metros. Por el día sería imposible casi de ver porque el plástico que tiene no es transparente pero por la noche canta un montón. Hay una lucecita roja que se enciende cuando no hay consumo en la casa».
Pero esto no sólo ocurrió aquí, hay bastantes más pueblos afectados. Mañana viernes de hecho se van a reunir todos los alcaldes de los pueblos que han sido desvalijados con el Teniente Coronel de la Guardia Civil para intentar aumentar la vigilancia en la zona.
«Nosotros vemos una pareja de la Guardia Civil de viento al viento. A lo mejor vienen y no los vemos, pero si nosotros no los vemos yo creo que los que vienen a robar tampoco».