El Ayuntamiento aprueba el pliego de bases de concesión para la construcción de la playa artificial más grande de Europa
El Pleno del Ayuntamiento de Alovera (Guadalajara) aprobó el pasado lunes, con los votos a favor de Alternativa Alovera, PP, Ciudadanos y Vox, y los votos en contra de Unidas Podemos y PSOE, el pliego de bases de concesión para la construcción de Alovera Beach en una parcela municipal. Unidas Podemos critica que salió adelante «sin la elaboración de un nuevo informe de viabilidad económica que tenga en cuenta el impacto del centro de ocio Oasiz», emplazado en la vecina localidad de Torrejón de Ardoz.
UP afirma que Oasiz, «que ya está funcionando y cuenta con una playa artificial y con una oferta de entretenimiento más amplia que Alovera Beach, tendrá un grave impacto en la viabilidad económica del parque proyectado por Rayet que se ha ignorado en el Pleno». El portavoz del grupo municipal de UP, Julián Martínez, ha hecho hincapié también en «el grave despropósito que supone la construcción de una playa artificial que se va a llenar con agua potable».
En este punto, recuerda «los graves problemas de sequía que padece la provincia» y que «algunas localidades se ven obligadas a abastecerse con camiones cisterna los veranos», y califica de «desmesuradamente optimistas» las previsiones sobre «mínimo uso de productos químicos, consumo de energía para el filtrado de agua y necesidades de abastecimiento, sin informes técnicos ni científicos que avalen estas supuestas ventajas».
Asimismo, según Unidas Podemos, «queda en el aire cómo se van a solventar cuestiones como el incremento del tráfico en Alovera o la terminación de la construcción de una nueva planta depuradora que satisfaga las necesidades creadas por el parque de ocio». Julián Martínez concluye que «nos olvidamos de el agua es un bien de primera necesidad para llenar una playa artificial, que llenará los bolsillos de una empresa privada y dejará sin un espacio público y gratuito a nuestro municipio».
El proyecto
Como contamos aquí en MiraCorredor, el grupo constructor Rayet invertirá 15,6 millones de euros para crear la mayor playa artificial urbana de Europa en la localidad de Alovera, que albergará un enorme lago artificial de 25.000 metros cuadrados, una playa con chiringuitos, una zona para practicar deportes náuticos, y un gran parque acuático. El proyecto será realizado por la multinacional especializada en playas artificiales Crystal Lagoons, y consta de una laguna artificial de color turquesa junto a una playa artificial de 15.000 metros cuadrados.
El complejo se va desarrollar en unos terrenos dotacionales de unos 105.000 metros cuadrados propiedad del Ayuntamiento de Alovera y su objetivo es impulsar el turismo local, creando además 170 empleos directos y unos 200 empleos indirectos. El proyecto contará con cinco zonas diferenciadas, pero integradas: una lámina de agua y playa con zonas de navegación y baño libre separadas; equipamiento deportivo y de entretenimiento (tirolinas, pista de voley, zona infantil y gimnasio al aire libre); torres de toboganes y piscinas infantiles; escuela de vela y deportes náuticos (kayak, vela y paddle surf, entre otros); y servicios de restauración (restaurante, chiringuito y snack bars).
Además, se ha proyectado una gran zona de aparcamiento con más de 1.000 plazas y se ha planificado el acceso mediante comunicación directa con la A-2 para no congestionar el núcleo urbano de Alovera. El presidente del grupo Rayet, Felix Abánades, aseguró en su día que «Alovera Beach representa un concepto innovador que transformará Alovera y que posicionará al municipio en el mapa europeo de la tecnología, la innovación y la sostenibilidad, y como referencia única en actividades al aire libre», durante la presentación del proyecto en Madrid, donde ha insistido en que es «sostenible y viable».
Alovera Beach se desarrollará dentro del sector I-15 Las Suertes, al sur del casco antiguo de la localidad, vinculado a los desarrollos residenciales del municipio, median concesión administrativa por la que el Ayuntamiento recibirá un canon anual, y cuenta con el visto bueno inicial del Gobierno de Castilla-La Mancha. Según cálculos de los promotores, se esperan entre 250.000 y 400.000 visitantes al año con un precio de acceso al recinto que podría rondar los 10 euros por persona, aparte del consumo en restaurantes y de otras actividades que se abonarían aparte. La apertura está prevista para el verano de 2023.